José Meléndrez Pascual encontró una oportunidad de negocio gracias a la pandemia. Puso en marcha Atlántico Cocina Nómada, un servicio personalizado de cocina de alto nivel a domicilio con unos menús en los que están presentes los mejores productos del mercado
16 jul 2022 . Actualizado a las 05:00 h.Lo suyo es «cocina de alto nivel a domicilio y eventos gastronómicos personalizados», explica. Y su filosofía es clara. «Trabajo para un público que valora tanto los productos de primera calidad bien trabajados como la discreción. Me estoy metiendo en casa de la gente y sería feísimo que hablase de lo que comen o de lo que hacen», destaca José Meléndrez Pascual. A sus 48 años está al frente del proyecto con el que soñaba cuando era un adolescente. Se llama Atlántico Cocina Nómada y está teniendo tanto éxito que lo más complicado es encontrar una fecha libre en la agenda para que José vaya a tu casa. «Me da rabia, pero este verano he tenido que decir que no a un montón de propuestas. No quiero crecer porque lo mío es personal y no puedo mandar a otra persona para que cocine en directo», explica. Lleva a cada domicilio todo lo necesario para elaborar un menú de ensueño y es capaz de interactuar con los invitados sin dejar de trabajar y montar los platos.
Oportunidad en la pandemia
La aventura de José empezó con la pandemia. «Me tuve que reinventar. Yo no soy chef y no quiero que digan que lo soy. Soy cocinero y doy de comer lo mejor posible. Desde que tenía 14 años ando metido en los fogones, pero cuando dije en casa que quería estudiar cocina... Soy licenciado en Dirección de Empresas, pero lo que me gusta es esto», explica. Recuerda el día que le llamaron de una productora que tenía problemas para dar de comer a un grupo de gente. Dijo que adelante porque «en aquel momento no había nada que hacer, estaba todo parado. Empecé con ellos y ya no dejaron que me fuese. Fueron surgiendo cáterings para producciones de moda, cursos para amigos, fiestas...», relata. En sus menús no hay nada de espumas ni esferificaciones ni cosas raras. Pero sí producto y más producto. «Llevo de compras desde las nueve de la mañana porque tengo mañana y pasado (charlamos el lunes por la tarde) eventos para 30 personas. Compro en diferentes sitios y creo que esa selección y el montaje de la mesa, con una gran cesta de distintas variedades de panes, son mis señas de identidad», asegura.
Productos exclusivos y escogidos
En sus menús hay platos tan atractivos como un salmón ahumado Uga de Lanzarote que corta a mano, carpaccio de calabacines, tartar de cigala con aguachile, tiradito de pargo o lubina y gildas, tataki de vaca gallega con trufa, o una completa ensalada de las hortalizas del Navazo de Sanlúcar de Barrameda que acompaña de unas natas francesas que son una locura. Hay muchas opciones más según los gustos de los comensales. En la comida del cocinero nómada a la que tuve la suerte de asistir disfruté como hacía tiempo que no disfrutaba. Sería complicado quedarse con un plato, pero me encantó la combinación de tradición, modernidad y exclusividad que logra con unas sencillas patatas fritas en sartén que acompaña con unos huevos que prepara en una roner portátil a 62 grados durante 40 minutos y que remata con una generosa cantidad de caviar Calvisius. Pueden contactar a través de su cuenta de Instagram. «El teléfono no lo cojo si estoy preparando la comida», sentencia el cocinero nómada.
El cocinero nómada llega a tu casa - La Voz de Galicia
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