"Quiero ser cocinero y también astronauta" - La Crónica de Badajoz

Álvaro no se resiste a morder la manzana que está cortando antes de insertarla en la brocheta de frutas con chocolate, uno de los platos que va a preparar con sus compañeros de campamento. Tadeo aún no se ha atrevido a pelar medio plátano que tiene en el plato. Por un día son chefs, con sus gorros de cocinero y delantales rojos. Tadeo y Álvaro tienen 6 y 7 años y son dos de los 20 niños que participaron ayer en la primera jornada del campamento gastronómico de verano que la Diputación de Badajoz ha organizado en el Hospital Centro Vivo.

«Hoy hemos bailado, hemos cogido los ingredientes, los hemos cocinado y yo me he hecho un buen daño», relataba Tadeo mientras mostraba su pequeño dedo índice envuelto en una tirita. «Ha sido cortando el pimiento». Un accidente del que se olvidó rápidamente cuando empezó a contar qué platos iban a preparar: «pasta y una ‘boncheta’». A Tadeo lo que más le gustó de todas las actividades fue «cocinar». ¿Ya sabías cocinar?. «Sí, claro, es que yo voy a ser cocinero, también pintor y también astronauta». Álvaro, a su lado, asiente, pues piensa lo mismo. Su plato preferido es «la sopa», que espera aprender a hacer, algún día.

Los niños fueron a comprar primero lo que necesitaban para cocinar. SANTIAGO GARCIA VILLEGAS

El campamento empezó con un desayuno saludable, confeccionaron un mural y ensayaron un baile. Después fueron juntos a hacer la compra, a la tienda de Semilla y Grano y la frutería de enfrente. «El consumo es diferente al habitual, pues ellos no compran la pasta al peso sino en paquetes, y les explicamos la diferencia», contó el organizador, Luis Rodríguez, de la Casa de los Sentidos. Prepararon espaguetis integrales con una ‘falsa boloñesa’: toja texturizada en lugar de carne y levadura nutricional en lugar de queso, además de cebolla, pimiento, zanahoria y tomate. «Los introducimos en una comida distinta, con procesos naturales, saludable y consumo colaborativo dentro del barrio». Todos esos objetivos se alcanzan con esta actividad.

Cada día asisten 20 niños: 120 a lo largo de 8 días. La primera semana, los más pequeños y, la segunda para los que tienen de 8 a 12 años. Esta mañana los primeros han llegado con sueño. «Queremos ver los dibujos, me han pedido algunos, y nuestra respuesta ha sido hacer un tik tok». En menos de 24 horas se agotaron todas las plazas. «Un éxito».

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